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Vale, lo admito: aparte de mi breve romance con Galaga y un poquito de Frogger al que jugué de niño, nunca me he involucrado de manera significativa con la gran mayoría de los juegos de arcade. Es mi punto más débil en cuanto a géneros de videojuegos en los que estoy familiarizado y, como tal, acudí a mi cita para jugar a Yars Rising con solo un conocimiento mínimo de su primera entrega y del impacto que tuvo en su momento.
Tras su lanzamiento en 1982, Yars’ Revenge (la primera entrega de la serie Yars) se convirtió en el título original más taquillero para Atari 2600. Ha formado parte de varias colecciones de clásicos de Atari, varias listas de «Los mejores juegos de todos los tiempos» y una exposición sobre la historia de los videojuegos en el Museo de Arte Moderno de la ciudad de Nueva York. Aunque parte de su popularidad se debió a que Atari era una potencia de los videojuegos en aquel momento (lo que le dio al estudio los recursos necesarios para promocionar Yars’ Revenge y generar «publicidad», como lo llamaríamos aquí en el año 2024), también fue un shooter de ciencia ficción increíblemente sólido.
Sin embargo, a pesar de su éxito, una continuación de Yars’ Revenge (un shooter sobre rieles llamado Yar’s Revenge) no surgió hasta casi tres décadas después y fue recibida en gran medida con desdén.Incluso del creador de la serie, Howard Scott Warshaw.. Pero después otro Después de una década de trabajo y otro intento de reavivar el fandom de Yars con Yars: Recharged, Atari ha reclutado a un nuevo estudio, WayForward, el desarrollador de Shantae y River City Girls, para ayudar a revitalizar la serie. ¿El primer desafío para WayForward? Alejar a Yars de las moscas y los alienígenas y llevarlo hacia una nueva dirección más llamativa. Y, en base al tiempo que pasé con la próxima reiteración, estoy seguro de que lo logrará.
En lugar de ceñirse a las raíces de los juegos arcade de Yars, Yars’ Rising reinventa el juego como un metroidvania ciberpunk. Sin embargo, el juego sigue honrando su pasado al incorporar juegos arcade a lo largo del juego a través de terminales que la protagonista Emi «Yar» Kimura debe piratear para mejorar sus habilidades y obtener nuevos poderes. Esto crea el bucle de juego principal, así como esa sensación de metroidvania, ya que los nuevos poderes significan acceso a nuevas ubicaciones que antes estaban fuera de su alcance.
Resulta muy fácil sentirse como la mismísima Samus Aran a medida que recorres el laboratorio futurista de QoTech (agachándote, saltando por las paredes y abriéndote paso a tiros entre obstáculos y enemigos), aunque diría que, por lo que vi, Yars Rising carece de la misma tensión, los mismos puzles complejos y la sensación de progresión y recorrido hipersatisfactoria que muchos otros títulos del género, para bien o para mal. En muchos sentidos, parece un gran punto de partida para quienes son nuevos en el género: tienes minijuegos arcade de ritmo rápido que requieren reflejos decentes y añaden desafío (en particular para aquellos de nosotros que crecimos después de su época), algunas plataformas y combates ligeros en 2D, y esa sensación de logro de desbloquear un nuevo poder y saber exactamente qué hacer con él. Pero donde Yars Rising realmente brilla es en su estética general.
No es de extrañar que WayForward sepa cómo hacer que un juego resulte elegante y animado, y esto es lo que principalmente distingue al juego de otros juegos de acción y aventuras en 2D. Yars Rising comienza con una introducción de estilo cómic (un homenaje a la serie de cómics Yars que se publicó poco después del juego original) en la que nuestra protagonista al estilo de Ramona Flowers, Emi, se viste frenéticamente y sale de su casa para trabajar en un trabajo que odia. Es fácil adorar a Emi de inmediato, con su actitud valiente y su atuendo a juego, pero ella no es el único personaje adorable de Yars Rising.
Durante los 40 minutos que jugué, conocí a varios personajes adorables inspirados en el anime que estoy seguro que otros querrán ver; yo mismo no fui inmune a la buena apariencia de la Sra. Davidson, su cabello rosa y su actitud arrogante. Casi todos los personajes del juego tienen cabello colorido, ropa técnica elegante y personalidades audaces, y junto con los niveles iluminados con neón y la música tecno-pop animada del juego, esto crea una sensación general de alegría y energía en el juego. Teniendo en cuenta que tu objetivo principal es derribar una empresa corrupta y opresiva, parece una elección divertida y muy consciente mantener las cosas un poco más alegres y al estilo anime. Entonces, si bien la jugabilidad puede resultar familiar, había suficiente estilo y bromas divertidas para darle a Yars Rising su propio sentido de identidad y mantenerme interesado.
Yars Rising también implementa un sistema divertido que los fanáticos de Nier Automata reconocerán automáticamente y fue un giro muy intencional del juego de acción de ciencia ficción, según los desarrolladores con los que hablé. Emi puede biohackearse a sí misma y equipar mejoras insertando bloques similares al Tetris, cada uno representando una habilidad diferente, en una cuadrícula con ranuras. Los poderes y las mejoras variarán en tamaño y forma, con poderes más simples que ocupan un bloque de espacio, mientras que los poderes más complejos están compuestos de múltiples bloques en una forma más difícil de colocar. Otra cosa que realmente disfruté fue cómo incluso las características pequeñas, como la capacidad de escuchar música, dependían de equipar la mejora correcta (en este caso, los auriculares de Emi).
En general, me lo pasé genial jugando a Yars Rising. Aunque no me pareció nada especialmente novedoso o desafiante, fue una experiencia divertida que me dejó con ganas de ver aún más del mundo de Emi y los adorables personajes que lo habitan. Yars Rising está previsto que llegue a PC, Nintendo Switch, PS4, PS5, Xbox One y Xbox Series X|S el 10 de septiembre de 2024.
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