Si cree que el trabajo de Apple Maps es ofrecer una guía imparcial de las calles, edificios y negocios en una parte determinada del mundo, es posible que deba ser más inteligente. Porque se espera que Apple venda posiciones destacadas en sus rankings de búsqueda el próximo año, según un nuevo informe.
Hace tres años, Mark Gurman de Bloomberg informó que Apple estaba considerando un plan para llevar más publicidad a iOS. Esto podría incluir Apple Books y Podcasts, dijo, junto con un nivel más económico de Apple TV+. Pero la primera prioridad fue Apple Maps. Según la última edición del boletín Power On de Gurman, ese plan está a punto de concretarse. Ahora existe la expectativa, dice, de que los anuncios puedan comenzar a aparecer «ya el próximo año».
La idea es que al realizar una búsqueda de «restaurantes» o «comida mexicana» o «reparación de calzado» o lo que sea, se producirá la misma lista que ves actualmente, organizada según los criterios de relevancia, proximidad, calificación, etc. de Apple. Pero uno o más espacios destacados en la parte superior se cederán a los anunciantes que pagan, tal como ocurre actualmente cuando se realizan búsquedas en la App Store.
Para tener una idea de cómo funciona esto actualmente, simplemente busqué «Mapa» en la App Store y los cinco primeros resultados orgánicos para mí fueron Google Maps, Waze, Apple Maps, Google Earth y Citymapper. Pero el primer puesto lo ocupó una aplicación menos conocida que, de otro modo, aparecería (y sigue apareciendo) en el décimo lugar de la lista. El hecho de que se trata de una tragamonedas paga se indica con un color de fondo azul pálido y una pequeña etiqueta de «Anuncio» debajo del nombre de la aplicación.
Como observa Gurman, es probable que Apple experimente un rechazo de los clientes cuando los anuncios lleguen a Maps, tal como sucedió cuando aparecieron en Noticias y Bolsa en 2022, o cuando iMovie comenzó a mostrar anuncios de Final Cut Pro, o cuando los espectadores comenzaron a detectar productos de Apple en posiciones destacadas en los programas de TV+. Uno habría pensado que la compañía gana suficiente dinero con las ventas de hardware premium y su parte de los ingresos de las aplicaciones, y no necesitaría convertir todo en un anuncio. Pero el rechazo no hizo cambiar la opinión de Apple antes, y sería ingenuo esperar que esta vez fuera diferente.


