Samsung se enfrenta a un escrutinio por una aplicación preinstalada en algunos de sus dispositivos asequibles que los usuarios no pueden eliminar fácilmente. La controvertida aplicación, llamada AppCloud, está diseñada para recomendar e instalar aplicaciones de terceros durante la configuración o actualización del teléfono en los modelos de las series Samsung Galaxy A, M y F. Sin embargo, los usuarios y los grupos de derechos digitales lo etiquetan como bloatware y expresan algunas preocupaciones sobre la privacidad.
El problema central es simple: AppCloud está integrado a nivel del sistema. Esto significa que los usuarios normales no pueden desinstalarlo. La aplicación permanece en el dispositivo incluso cuando está desactivada y, a menudo, reaparece después de las actualizaciones de software. Los usuarios informan que los permisos de su sistema son amplios y solicitan capacidades como «acceso completo a la red» y el derecho a «descargar archivos sin notificación».
Algunos usuarios de teléfonos Samsung alarmados por la ‘AppCloud’ inamovible vinculada a Israel
La controversia va más allá de la mera molestia. El desarrollador de la aplicación es ironSource, una empresa fundada en Israel y ahora propiedad de la firma estadounidense Unity. Este vínculo ha intensificado el escrutinio, particularmente en regiones como Asia Occidental y África del Norte (WANA). Allí, los vínculos comerciales con empresas israelíes suelen ser restringidos y los temores de los consumidores sobre la vigilancia electrónica aumentan.
La organización de derechos digitales SMEX, con sede en Beirut, pidió formalmente a Samsung que abordara el problema. Alegan que AppCloud recopila en secreto datos de los usuarios e instala otro software sin consentimiento explícito. Ellos tenga en cuenta que la falta de una política de privacidad de fácil acceso erosiona aún más la confianza. Para aumentar la alarma, ironSource tiene un historial controvertido, ya que anteriormente se le había asociado con programas que instalaban software sin una validación clara del usuario.
Para muchos usuarios, este componente del sistema, junto con sus vínculos geopolíticos y su historial de problemas de privacidad, desdibuja la línea entre la tecnología publicitaria agresiva y algo más invasivo. Los defensores de los consumidores instan a Samsung a proporcionar una opción de exclusión clara con un solo clic durante la configuración o a dejar de precargar el software por completo. A pesar de la creciente tendencia de preocupación en línea, Samsung aún no ha emitido una declaración oficial que aborde el asunto.


