Un veterano de Bethesda dice que los jugadores están «fatigados» por los juegos aparentemente interminables

Entre juegos masivos de mundo abierto como Elden Ring y el próximo Grand Theft Auto 6, o títulos de servicio en vivo como Call of Duty: Black Ops 6 y Marvel Rivals, no faltan juegos que pueden consumir el tiempo libre de los jugadores. Y es por eso que la industria puede haber llegado a un punto de inflexión con sus juegos aparentemente interminables, según el veterano de Bethesda Will Shen.

Shen, quien anteriormente fue el diseñador principal de misiones en Starfield, compartió recientemente sus pensamientos sobre los jugadores que se desaniman de saltar a juegos grandes durante su aparición en Kiwi Talkz. Aceptó que algunos de sus títulos anteriores de Bethesda, incluido Skyrim, que «puedes jugar prácticamente para siempre», pueden haber contribuido a la fatiga del jugador. Sin embargo, Shen sostiene que la sobresaturación de juegos gigantes deja a los jugadores sin tiempo suficiente para invertir completamente en nuevos títulos.

«Estamos llegando a un punto en el que la gente está fatigada, o un sector grande, un sector cada vez mayor de la audiencia, se está fatigando al invertir más de 30 o más de 100 horas en un juego», explicó Shen. «Porque ya tienen eso. Ya tienen los juegos a los que volverán continuamente, y agregar otro a esa lista es una tarea difícil. Siempre es una tarea difícil».

Shen destacó el éxito de juegos más cortos como Astro Bot y Mouthwashing como títulos que los jugadores pueden disfrutar fácilmente sin tener que invertir grandes cantidades de tiempo. También sugirió que la corta duración de esos juegos permite que más jugadores creen una comunidad a su alrededor porque todos han podido «participar plenamente en la totalidad del producto».

Los largos títulos AAA van de la mano de los crecientes presupuestos para videojuegos. El cofundador de Naughty Dog, Andy Gavin, reveló recientemente que una de las razones por las que aceptó vender su empresa a Sony fue para evitar que los enormes costos de desarrollo hundieran todo lo que él y su equipo habían construido antes de 2001. Esos crecientes gastos también contribuyeron a la devastadora pérdida de empleos en la industria de los videojuegos el año pasado.